Fraternidad Velad y Orad, San Fernando 2024.
Mi alma desea profundamente llegar a la unión total con Dios, todo mi ser quiere entrar en misterio de comunión, amor esponsal de mi alma con Cristo, en la Santísima Trinidad. «Ya no eres esquiva», ya no puedo esquivarte, no puedo olvidarme de ti, no puedo huir, te busco con ansias de amor. «Rompe la tela de este dulce encuentro», esa tela misteriosa de mi separación sutil entre yo, pobre creatura y Tú, mi Creador. Que se rompa esa tela para saciar mi anhelo de unión íntima y profunda de mi corazón con tu Corazón, Dios mío. ¡Cuánta ternura y dulzura en tan bello encuentro! «Oh llama de amor viva!», el alma aunque ya goza de tu presencia divina se dirige a la «llama», fuego de amor, porque el amor de Dios ha sido derramado en mi corazón (cf Rom 5,5), mística de un amor eterno.